Desarrollado por una empresa canadiense, el Atlas WatFly es un rotor eléctrico inclinable adav basado en un diseño de sillón de cola. Este curioso dispositivo monoplaza de uso recreativo se comercializará a partir de 2021.
Por increíble que parezca, unos pocos privilegiados que viven en América del Norte podrían volar el año que viene en este asombroso avión eléctrico de cuatro rotores. Imaginado por dos estudiantes de la Universidad de Waterloo (Canadá), el Atlas es lo que llamamos un avión de despegue y aterrizaje vertical o adav. Pero este tiene la particularidad de usar un diseño de «tail-sitter», donde el avión descansa en su cola cuando está en el suelo.
El piloto se sienta en una cabina con una vista de 180° a través de la superficie de vidrio. Dos rotores basculantes están alineados a cada lado de la cabina en una misma ala. Orientados verticalmente para el despegue y el aterrizaje, giran horizontalmente para el vuelo real. Y para que el piloto no tenga que cambiar la configuración, la cabina está conectada por un sistema de cardán que permite al piloto mantener su posición sentada independientemente de la posición del ala.
WatFly, la empresa emergente creada para dar vida a este proyecto, proporciona sólo unos pocos detalles técnicos sobre el Atlas. Hecho de fibra de carbono, la máquina tiene una envergadura de 4,6 metros para 2,5 metros de altura y un peso en vacío de 129 kg. Puede llevar una carga de hasta 113 kg y volar a 200 km/hora. Su batería le permitiría volar durante una hora.
Debido a su configuración, el Atlas calificaría como un vehículo aéreo ultraligero según la legislación de la Administración Federal de Aviación (FAA) de los Estados Unidos. Esto significa que el piloto no necesitaría una licencia y que el uso de la aeronave se limita a fines recreativos, con la prohibición de volar sobre zonas densas, incluidas ciudades y pueblos, así como espacios aéreos específicos. A pesar de la poca información disponible y la dificultad de medir la viabilidad del proyecto, WatFly se propone comercializar el Atlas el año próximo por 150.000 dólares (138.000 euros al precio actual). Para entonces, esperamos al menos descubrir un prototipo operacional.