El concepto de CNC suena extraño para la mayoría de nosotros, pero el equipamiento perteneciente a la categoría CNC es algo habitual para quienes pertenecen a las industrias de fabricación y manufactura. Las siglas CNC significan Control Numérico por Ordenador, el cual se viene utilizando desde los años 70, con la introducción de los ordenadores. Precisamente de ahí viene su nombre, salvo que al principio se llamaba sólo NC o control numérico cuando se introdujo por primera vez.
El CNC está diseñado para reducir la intervención manual en un determinado proceso de fabricación, disminuyendo así el tiempo de producción y las pérdidas, lo que se traduce en un aumento de la eficacia de la producción. Como ejemplo, la preparación del metal con herramientas convencionales requeriría que el operario perforara manualmente el metal con una prensa de perforación. Pero para poder hacerlo, tiene que fijar el metal en su lugar, seleccionar la velocidad deseada para la rotación de la prensa de taladro, activar el husillo e introducir manualmente la broca en el metal. Eso conlleva muchos pasos y es probable que se produzcan errores y accidentes en cada paso del proceso.
La máquina CNC simplifica todo este trabajo para el operario. Con el equivalente CNC de la prensa de taladro, sólo tiene que colocar el metal en su lugar, activar el husillo, ajustar los controles y la máquina hace el resto. Se asemeja mucho a las formas automatizadas de hacer las cosas. Se puede programar todo lo que un operario debe hacer con las máquinas herramienta convencionales con las máquinas CNC.
Otras de las ventajas de una máquina CNC es poder producir piezas de trabajo consistentes y precisas. Cuando los controles de programación se han ajustado, la máquina CNC puede producir miles de piezas idénticas en un corto espacio de tiempo, como el mecanizado de tubos. Esta tarea es casi imposible si se realiza manualmente.
Las máquinas CNC son además flexibles ya que los procesos están programados. Se puede ejecutar un programa específico para una pieza, guardarlo y recuperarlo la próxima vez que haya que reproducir esa pieza. Asimismo, estas máquinas son fáciles de configurar, lo que le permite cumplir sus plazos de entrega con mayor rapidez.
Cualquier máquina CNC tiene control de movimiento, ya sea lineal o rotativo. Esta es una de las cosas que tienen en común. La trayectoria o dirección que sigue la máquina se llama eje. Cuando más ejes tenga la máquina, más compleja será.
Entre los ejemplos industriales más comunes de herramientas CNC se encuentran las soldadoras, los taladros, las amoladoras, las fresadoras y los tornos. Pero es importante saber que incluso hay herramientas domésticas que pertenecen a la categoría CNC. Se trata de cortadoras de papel electrónicas, máquinas de acolchado y bordado y, sí, la impresora de su ordenador, que funciona sólo con el eje X.
Aunque no lo sepamos, es posible que algunas de las herramientas con las que nos encontramos en nuestros respectivos negocios sean también máquinas CNC. El uso de estas máquinas no es exclusivo de la industria del metal, también se utilizan en empresas de gran envergadura, sobre todo aquellas que requieren la producción en masa de artículos. Al aumentar la demanda, la necesidad de los productores de satisfacer estas demandas se hace más urgente también. Y gracias a las máquinas CNC, los distintos procesos de producción son más rápidos, sencillos y seguros.